LA LLORONA

LA LLORONA

INTERPRETADA POR NAYELI CORTES CASTILLO

Esta Obra Basada en una de las leyendas con más arraigo dentro de la cultura mexicana y celebrando su XXX aniversario, el espectáculo multidisciplinario de Música, Teatro y Danza, La Llorona se presenta en la zona ecológica y chinampera de Cuemanco de la Alcaldía Xochimilco.
Enraizado en medio de la enigmática laguna de Tlilac, se encuentra el escenario que, rodeado por sus canales y chinampas, en la zona ecológica de Xochimilco, se convierte en el lugar idóneo para su representación dentro del marco de la celebración del Día de Muertos en la CDMX.
El espectáculo de “La Llorona” surge en 1993, con el objetivo de difundir la riqueza natural de Xochimilco y contribuir al rescate y preservación de la integridad cultural, artística e histórica de nuestra identidad nacional, mediante diferentes expresiones artísticas como la música, el teatro y la danza prehispánica. El trabajo en conjunto de estas disciplinas busca hacer conciencia en torno al rescate de la zona chinampera de Xochimilco, sitio nombrado Patrimonio Cultural de la Humanidad en 1987 por la UNESCO, incorporado a la Asociación Mexicana de Ciudades Patrimonio más tarde (2011) y cuyas chinampas fueron oficialmente reconocidas como sistema importante del Patrimonio Agrícola Mundial (SIPAM) como Patrimonio Agrícola Mundial por la Organización de la Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) en el 2018.


Los objetivos que se pretenden alcanzar con esta propuesta multicultural son: difundir el valor de la tradición oral tratando de generar el gusto por las leyendas mexicanas; valorar y conservar nuestro entorno natural y tradiciones propias de la zona; impulsar la investigación histórica de nuestra región al generar lazos de solidaridad, acompañamiento  y trabajo en conjunto que permitan llevar a cabo actividades turísticas y culturales de manera consciente pero, sobre todo, responsable de la importancia histórica y valor cultural que la región ofrece, al tiempo en que se busca la reactivación economía de la comunidad que vive por y para el turismo local y extranjero; finalmente, generar mediante la puesta en escena la empatía y los valores que como pueblo nos ayuden a unirnos más y abrazar la idea de que solo mediante las diversas expresiones artísticas, presentes en este espectáculo, podremos comenzar a entender de dónde venimos, en dónde estamos y hacia dónde queremos llegar.
Debido a lo anterior, el espectáculo año con año pretende recordar o bien, conmemorar algún momento histórico de nuestro país o dar voz a algún hecho actual sobresaliente que merezca el voltear la mirada para no olvidar, tomar conciencia y, sobre todo, tomar acción sobre el mismo, motivo por el que este año se presenta bajo el nombre “Chokani”, palabra en lengua Náhuatl cuyo significado en español sería “la que llora”, como una manera de resaltar la relevancia de las lenguas originales de nuestro país en nuestro entorno actual, en el entendido de que todo lo que vemos, todo lo que nos rodea, nos define en el momento en el que lo nombramos, lo aprehendemos, lo hacemos nuestro al mismo tiempo que definimos nuestro modo de ver el mundo, de definirnos como pueblo.


EL ORIGEN
En sus inicios, tras una reunión entre agricultores, chinamperos, remeros de trajineras y gente de la propia comunidad Xochimilca, surge la iniciativa para desarrollar un proyecto cuya meta sería la de ofrecer un espectáculo multidisciplinario que integrase música, teatro y danza prehispánica; que resaltará los valores y cultura que ellos como Xochimilcas heredaron de sus antepasados y que a su vez, ofreciera la oportunidad de realizar un paseo en Trajinera, por los canales, dentro de un espacio natural como nunca antes se había visto en la zona, de noche, iluminados por la luz de la luna, dando a conocer un Xochimilco que no se conocía hasta el momento.
Y es que al ser el referente más importante de lo que aún se conserva de la zona lacustre de la Cuenca de México, Xochimilco es el lugar ideal para la realización de este espectáculo; un sitio donde sus habitantes se resisten a dejar morir su cultura, sus tradiciones, creencias y celebraciones. Caso particular ocupa el Día de Muertos, fecha en la que la comunidad participa con la colocación de las ofrendas en las casas; la visita a los panteones para velar a sus familiares y la tradicional “calavereada”, en la que chicos y grandes van de casa en casa pidiendo “calaverita” como lo hiciesen sus padres, y los padres de sus padres. Es gracias a esa tenacidad para conservar las tradiciones que, dentro del marco de esta celebración, tan importante para los mexicanos, el Embarcadero Cuemanco, de la mano del Grupo Artístico NAHUI TEOTLS, formado por artistas de varias disciplinas, así como prestadores de servicios turísticos, y la comunidad en general, recibe a sus visitantes con esta puesta en escena, basada en la tradicional leyenda de la Llorona.
SINOPSIS DE LA OBRA
Se han extendido los rumores acerca de la llegada de extraños hombres de pálida piel, y ropajes de metal; Nahui es una noble mujer con un profundo amor por su pueblo que al saber sobre la presencia española advierte al Señor Xochimilca y hermano, Yaotécatl, sobre las consecuencias de cruzar sus caminos con los recién llegados, quienes tienen claras las intenciones con las que llegan al sitio, dando lugar a uno de los eventos de mayor trascendencia en la historia de lo que hoy llamamos, México. A lo largo de la puesta en escena conoceremos las intenciones, motivaciones y preocupaciones que cada uno de los personajes, al mismo tiempo en que el pasado y el presente convergen para entender el proceder de una de las figuras más importantes dentro del imaginario colectivo del pueblo mexicano, La Llorona.  


RESUMEN 
Esta historia toma lugar en Xochimilco, pueblo de riveras llenas de flores y chinampas dadoras de alimento; pueblo tributario a la Gran Tenochtitlan, después de haber sido vencidos y conquistados por el pueblo mexica, viéndose obligado a brindar fuerza de trabajo, cosechas y tierras al Gran Imperio Mexica.  
Hombres extraños se han visto cada vez más cerca de la Cuenta de México, por lo que Yaotécatl, Señor Xochimilca, dispone a la fuerza guerrera a defender a su pueblo ante la incertidumbre que genera la presencia de los recién llegados, repeliendo así el primer encuentro entre ambos pueblos, un encuentro que sólo sería el comienzo de un proceso marcado por el rojo de la sangre y el dolor.
Por otro lado, Nahui, hermosa mujer noble, hermana de Yaotécatl aguarda la llegada de su hijo, ansiosa por mostrarle todo lo que ella ama con la esperanza de que, a su tiempo, el pequeño que vive en su vientre lo ame del mismo modo.
El panorama cambia cuando en medio de una celebración, el Tercio de avanzada español, comandado por el Capitán Pedro González de Trujillo, aparece para someter al pueblo xochimilca ante la mirada impotente de su gobernante, a quien se le ofrece la “oportunidad” de quitarse el yugo del imperio mexica a cambio de “cooperar” con los extranjeros.
Tras el primer encuentro Nahui ve cómo es que el entorno comienza a cambiar, la influencia de los extraños comienza a ejercerse cada vez más y la preocupación de perder la identidad que como pueblo ostentaban, aunada a la creciente incertidumbre de saber hacia dónde llevaría al pueblo xochimilca el nuevo camino con los españoles al frente, hacen que se replanteé su papel de cara a recibir al bebé que lleva en su vientre.

Mientras tanto, Yaotécatl, el Señor Xochimilca, permanece aislado esperando el momento oportuno para salir con rumbo a Tenochtitlan y buscar el apoyo en el Huey Tlatoani, por lo que orquesta su salida de Xochimilco en la oscuridad de la noche, partiendo de su tierra con la promesa de volver con apoyo y regresar al modo de vida pacífico que caracterizaba a su hogar, esperando volver pronto, esperando volver y encontrar un nuevo amanecer. Nahui despide tiernamente a su hermano esperando verlo pronto, esperando que a su encuentro, el hijo que ha esperado con tanto anhelo pueda conocer a su hermano, cuando de repente, el nacimiento de su hijo comienza.
Así, y gracias a Malitzin, el Capitán Pedro González de Trujillo, se entera de los planes de Yaotécatl mientras los hombres que hasta ese momento le seguían de modo incondicional, comienzan a increparle por el tiempo gastado, las energía perdidas y la falta de certeza en poder cumplir las órdenes encomendadas, desatando así disputas internas que terminan con la revelación de la verdadera naturaleza de Gonzales de Trujillo, poniendo fin a la vida de Malitzin e hiriendo de gravedad al Sargento, quien a punto de morir, encuentra el consuelo que esa tierra le brindó en el final de su travesía.
Yaotécatl vuelve a Xochimilco, con la felicidad en los labios, con gritos de victoria que anuncia el final del silencio impuesto por los españoles, los gritos de júbilo se posan en los labios de los Xochimilcas, quienes al ver a su señor, sienten energías renovadas, dispuesto a terminar con la presencia española en su territorio, hasta que el sonido ensordecedor de los arcabuces cesan la celebración, Pedro González de Trujillo ordena la matanza de los guerreros Xochimilcas, mientras se regodea con el sufrimiento que destroza a Yaotécatl al ver uno a uno a sus hombre caer, sin la posibilidad de hacer nada. Finalmente, Yaotécatl muere enarbolando la promesa de nunca irse del lugar.
Nahui, ya con su hijo, Huitzilin, en brazos llega al lugar acordado para el reencuentro con su hermano, sin embargo, se encuentra con una escena desgarradora, misma que la motiva a tomar la decisión más difícil de su vida, ofrendando su vida y la de su pequeño a Cihuacóatl, madre del pueblo Xochimilca, a cambio de no volver a ver sufrir a su pueblo, a cambio de permanecer en las aguas, en las chinampas, en el recuerdo de aquellos que vendrían después, con la promesa de reencontrarse con aquellos que amó y el destino arrebató.


SEMBLANZA DE LA PUESTA EN ESCENA
El espectáculo multidisciplinario de “La Llorona” cumple 30 años de presentarse en los Canales de Xochimilco, específicamente en la Laguna de Tllilac, dentro del Embarcadero Cuemanco. Con más de 700 representaciones que año con año envuelven al público en ese místico y majestoso mundo, creado por la luna de octubre y noviembre, así como por los canales, fieles guías que nos invitan a viajar al pasado.
“La Llorona” está conformada por música contemporánea con instrumentos modernos y prehispánicos, cantos en náhuatl, danza prehispánica de tradición y teatro, teniendo como escenario natural la zona chinampera de Xochimilco en la entrañable Laguna de Tlilac, lugar único en el mundo dónde todos los elementos como el agua de los canales, el viento nocturno, los sonidos de las aves y el soplar del viento entre los ahuejotes, son el marco perfecto para remontarnos a un México que fue y seguirá presente en Xochimilco, con sus canales y chinampas, un espejo apuntando hacia el pasado, una oportunidad de mirar hacia el camino recorrido y recordar las voces de aquellos que nunca se fueron..

Este espectáculo se presenta en los meses de octubre y noviembre, debido al misticismo que se crea por la celebración del Día de Muertos, y que hace del lugar, un sitio mágico, casi irreal dentro de esta grandísima urbe de la Ciudad de México; renovándose año con año para sumarse a las celebraciones del Día de Muertos y ofrecer una experiencia artística y cultural única en su clase a quienes buscan con gran interés vivir en carne propia esta leyenda de inmenso valor para los mexicanos.
Asimismo, la representación de “La Llorona” emplea elementos que permiten el rescate, difusión y conocimiento de la música y danza prehispánica, disciplinas que forman parte de nuestra identidad como descendientes de culturas ancestrales. Gracias al acercamiento con diferentes instrumentos musicales de origen prehispánico (huehuetl, panhuehuetl, teponazhuehuetl, teponaztli, flautas de barro, hueso y carrizo, ocarinas, jarros silbadores, aerófonos, caparazones de tortuga, tambores, tambores de barro, palos de lluvia, chicahuaztli, sonajas de guaje y de calabaza, raspadores de hueso, tenabaris, atecocolli) de los cuales, actualmente, varios sólo se observan en museos, y que sin embargo, hacen acto de presencia en este espectáculo, fusionando sus sonidos con los propios de instrumentos contemporáneos como el violín, guitarra, jarana y guitarras mexicanas entre otros. La música es pieza fundamental en el desarrollo de la atmósfera que invita al público a entrar en contacto con los sonidos ancestrales que forman parte de nuestra identidad mestiza.


RECONOCIMIENTOS

En el 2010, obtuvo el Galardón Especial de Honor de la Fundación Cultural Galerías “Plaza de las Estrellas”, por su magnífico montaje y exitosa temporada de la puesta en escena “La Llorona, de la Conquista al Bicentenario”, que se realizó en el Embarcadero Cuemanco, en donde los asistentes son llevados a la laguna de Tlilac en un recorrido en trajinera a través de los canales iluminados con antorchas.
En el 2013, “La Llorona” develó su placa conmemorativa por 20 años ininterrumpidos de representación teatral, motivo por el cual se contó con la presencia del secretario de Turismo del D.F. Miguel Torruco Marqués, quien la calificó como “Uno de los más importantes atractivos turísticos de la Ciudad de México y el disfrute de algo único en el mundo”. La develación de la placa conmemorativa fue realizada por el jefe de Gobierno del Distrito Federal, el Doctor Miguel Ángel Mancera, quien la felicitó en su 20 aniversario, así como calificarla como “Muy recomendable”.
A partir del año 2014 al 2018, CONACULTA (Consejo Nacional para la Cultura y las Artes) la recomendó mediante una cápsula en su cartelera cultural, asimismo, el jefe de Gobierno de la Ciudad de México, el Doctor Miguel Ángel Mancera, la recomendó ampliamente.
En año 2019 la temporada fue dedicada a la conmemoración del Centenario Luctuoso del General Emiliano Zapata, por lo que se le denomino “La Llorona, Tierra y Libertad” contó con la presencia de parte de la Familia Zapata y Autoridades de SECTUR.
A lo largo de sus XXX años de representación, LA LLORONA ha recibido a miles de visitantes nacionales y extranjeros para formar parte de esta mágica experiencia, motivo que ha permitido colocarla en uno de los más importantes eventos de la Temporada de DIA DE MUERTOS en la Ciudad de México y que, año

con año, se renueva sin perder la esencia de este emblemático personaje. Es así que La Llorona, o Chokani, se presenta como un personaje infaltable en el folclor mexicano, a veces temido y siempre en el pensamiento de un pueblo que se aferra a sus tradiciones; como una mujer que ante la injusticia levantó la voz por aquellos que no pudieron hacerlo, por aquellos que hoy en día sufren la pérdida de un ser querido, por aquellos que la indiferencia olvidó, pero sobre todo, como una madre que espera el día en que la lágrimas de dolor sean remplazadas por lágrimas de dicha, esa que sólo se obtiene con el abrazo anhelado, con la caricia tierna de unas manos conocidas, con el saludo alegre del pequeño que ansia llamarla “mamá”.
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