• La técnica de chapín o almácigos permite que al año tengan de tres a cuatro cosechas.
La zona chinampera de Xochimilco es de los pocos lugares de México que conserva la técnica de chapín o almácigos, de origen prehispánico, que consiste en sacar del fondo de los canales lodo con una caña especial denominada zoquimatl, cuenta el productor José Caputitla Ramírez.
“Con esta tierra mojada se hace una plancha y se cuadricula; con los dedos se hacen pequeños hoyos donde colocan las semillas. Se deja crecer y posteriormente se trasplanta”, señala.
Debido a que el lodo está compuesto de materia orgánica como pedazos de raíces, hojas y ramas es rico en minerales por lo que actúa como una especie de abono idóneo para el crecimiento de la planta.
Por su parte, la productora originaria de Xaltocan, Betsy Rosas Flores, explica que este método de cultivo lo han heredado de generación en generación.
Narra que sus antepasados le enseñaron a utilizar las propiedades que otorga la naturaleza, como el lodo o lirio acuático que utilizan como abono en sus cultivos, así como el agua de los canales.
Esta técnica de siembra, hace posible que en plena Ciudad de México, en los mercados de Xochimilco aún podamos encontrar verduras y hortalizas, tales como maíz, calabaza, verdolaga, jitomate, frijol, ejote, chile, chilacayote, cilantro, chayote, quelites, romeritos y huauzontle; así como diversas flores como nochebuena y cempasúchil.
