La vida es una pasarela y sólo se vive una vez, y esto es razón suficiente para querer usar todos los días nuestros accesorios favoritos, sin embargo, hay algunas reglas de etiqueta que debemos tomar en cuenta para nunca perder el estilo, marca de diamantes fuera de lo común, te comparte los mandamientos de joyería que tal vez no conocías. Joyería de día. Menos es más.
En las primeras horas del día, tus accesorios deberán ser más sencillos, sobre todo si piensas lucirla en la oficina. El oro blanco y rosa, serán tus mejores aliados. Los aretes, collares y anillos, de preferencia, deberán ser pequeños. Los colores terrozos combinarán perfecto con los rayos del sol y aunque no lo creas, resaltarán aún más tus outfits y estilo.
- En la oficina. Si tu trabajo es burocrático y formal, usar joyas exageradas no es lo más recomendable, ya que podrás desviar la atención hacia tus accesorios. Si tu trabajo es divertido y relajado, puedes llevar contigo piezas más llamativas y modernas. La joyería también define el grado de formalidad de un look! Juega con ella pero siempre piensa cuándo es el mejor momento.
- Cuando la luna se asoma. Oro amarillo combinado con diamantes en tonos incoloros, grisáceos y negros, sin duda, serán el arma secreta para brillar de noche. Apuesta y juega con tamaños más grandes y formas geometricas, pues son la tendencia que llegó para quedarse.
- Eventos formales. Son el momento perfecto para llevar tus diamantes favoritos y robar todas las miradas. Así que, sí o sí, opta por accesorios más brillantes y únicos.
- Proporción. Al igual que en la ropa, zapatos y bolsos, la joyería también tiene que ser acorde a nuestras dimensiones. Así que, si tienes manos muy pequeñas evita anillos XL, si tu cuello es muy largo, estilízalo con el dije correcto. La combinación es fácil, solo sigue tu proporción.
Calidad sobre cantidad. Es preferible invertir en pocas piezas de oro y piedras preciosas que incrementarán su valor y podrás usar todos los días, a sobrecargarse de muchas piezas de bisutería de mala calidad que perderán su valor y podrás utilizar solo por un tiempo limitado. Así que, de vez en cuando añade a tu alhajero alguna pieza que valga la pena (que vaya de acuerdo a tu estilo, que puedas utilizarla de día, noche, en eventos formales y casuales, una vez que tengas tus “básicos” podrás incluir nuevas adquisiciones).
Para los hombres. Aunque nos cueste aceptarlo, las normas son más estrictas y, de acuerdo con la etiqueta internacional, los caballeros no tienen muchas opciones. A menos que sea un artista, rockero, diseñador o poeta por dar algunos ejemplos. Si no es tu caso, es preferible que te mantengas clásico en el uso de joyas, tanto en eventos formales, sociales o, más aún, para reuniones de negocios: anillo de casado o un anillo statement,